COMO SABER LO QUE DICEN LOS HOMBRES REALMENTE

Para nadie es un secreto que el comportamiento de la gran mayoría de los caballeros no es muy bien visto por las féminas. Y no podemos negar que la frase todos los hombres son iguales, es una generalizada opinión. Pero aunque no lo crean, no todos lo son.

Ahora, si que existe, una gran parte de especímenes masculinos con muy comunes denominadores que los caracterizan. Tienen una retorica muy particular, recurren a trillados discursos y frases ya inventadas hace millones de años. 

Casi todos recurren a frases como “no eres tú, soy yo”, “no pude llamarte”, “te amo pero necesito mi espacio” etc. Puesto que las mujeres suelen tener un sexto sentido, podría pensarse que están siempre alertas. Aunque no precisamente siempre es así. Pero cuando ciertas señales u oraciones se repiten mucho, pone en práctica la capacidad que tienen las mujeres para ver el trasfondo de las cosas. Y no es que las mujeres siempre estén pensando maquiabelicamente. Es más bien, que estas saben generalmente los hombres mienten. 

Por ejemplo en el caso del típico no eres tu soy yo, comprende una clara ambigüedad. Si las mujeres refutan esta frase, la respuesta es una variación de la misma. Estoy pasando por malos momentos y no es justo para ti. Estas frases son discursos baratos. Cuando un hombre verdaderamente quiere a una mujer la quiere a su lado en todo momento. Normalmente es una excusa que busca terminar la relación.

Veamos otras

“Me fue imposible llamarte”: (Cuando no te han llamado en días). Esta viene acompañada de infinitas excusas. Tu mensaje me llego muy tarde, me quede sin batería al mismo tiempo que todos mis amigos etc. Actualmente existen muchas formas de comunicarse con cualquier persona en todo el mundo.

“Estoy muy cansado para salir”: desde luego que todas las personas se cansan. Desde luego que no siempre tenemos ánimo para salir. Lo que sucede es que curiosamente no usan esta frase al principio de la relación. Tampoco la usaran si saben que ha dicha salida asistirá un ex-novio o algún pretendiente de su chica. 

“Yo te dije”: esta frase la usan cuando no te habían dicho algo especifico, pero insisten en que si.

“Es que soy hombre”: famosísima frase. Esta viene a ser como un sello invisible que está íntimamente ligado a la entrepierna del susodicho. Esta oración es como un comodín. La usan en cualquier situación en que no quepa una excusa razonable. Es como si creyeran que estas cuatro palabras, los justifica en toda acción liberándolos de toda responsabilidad.

“No estoy diciendo eso”: estas palabras son delicadas por demás. Mi intención no es ponerme de lado de ningún bando. Por el contrario la idea de este artículo es la objetividad. Pero estas palabras son realmente peligrosas. Por excelencia las féminas tienen la habilidad de leer entre líneas. Cosa que casi ningún hombre puede hacer. Por consiguiente, a pesar de que ciertas palabras no hayan tenido una intención especifica, la mayoría de las veces las mujeres se quedaran con lo que han leído entre líneas.

De las diferencias que existen entre los hombres y las mujeres, una de ellas es como abordan la confianza. Cuando un hombre es traicionado por una mujer, este difícilmente volverá a confiar realmente en otra. Al contrario de las mujeres. Porque aunque ellas suelen manifestar siempre el hecho de que todos los hombres están cortados con la misma tijera, estas sí que tienen la capacidad de volver a confiar. Claro está, hasta que dicha confianza se rompa, y simplemente darán media vuelta.